Nos debemos de preparar para una entrevista de trabajo puesto que es una situación que puede producir un alto grado de nerviosismo y ansiedad.
Para eso hay que plantearse la entrevista como que hay que vender un producto: “tú mismo”, y como buen vendedor hay que saber cuáles son los puntos fuertes y vendibles del producto (formación, juventud, entusiasmo, experiencia, etc.), y cuáles son los puntos débiles, con la intención de compensarlos. Todo producto comercial posee unas cualidades internas y otras externas, hay que descubrirlas y venderlas.